08 abril, 2015

Nueva sección! Todas aman a: Paul Rudd

Hoy: Paul Rudd


Dudo que alguna vez compita por un Oscar. Tampoco lo imagino interpretando al Rey Lear, Hamlet o Ricardo III. No necesitamos que nos demuestre nada. Con su cara aniñada alcanza.
Paul Rudd es nuestro Dorian Gray. Siempre bello, siempre joven y casi siempre en estado de catástrofe emocional.
Si bien en los últimos años integra una suerte de "Bandita del Golden Rocket" junto a Jason Segal, Seth Rogen y Jonah Hill, producto de sus trabajos con el director Judd Apatow (figura clave de la comedia americana en la última década), nuestra memoria se vuelve selectiva  y prefiere vincularlo a las comedias naif de otra época, como aquella versión moderna y particular de Emma de Jane Austen llamada Ni idea (Clueless), haciendo pareja con su amiga personal Jennifer Aniston en El objeto de mi afecto o enamorando a Michelle Pfeiffer en El novio de mi mamá.

En el último año hizo un par de películas olvidables con las históricas estrellas de Saturday Night Life: Tina Fey y Amy Poehler respectivamente. Tuve la sensación, tanto en Admission con Tina Fey como en They came together con Amy Poehler, que ambas daban un riñón con tal de trabajar con él. Y se dieron el gusto. Ambas mancharon su filmografía con tal de besar al bello Rudd.

Mientras esperamos que próximamente se calce el traje de superhéroe (será Ant-Man) la vecinita hizo el esfuerzo de volver a ver una de las comedias del actor y repasar el triángulo amoroso Owen Wilson - Reese Whiterspoon - Paul Rudd en ¿Cómo saber si es amor? (How do you know?), una película de James Brooks en la que también participó Jack Nicholson.
No vale la pena reseñar la película porque este post no trata acerca de las 10 razones para ver. Además, How do you know no encaja en esa categoría, otra película de Paul Rudd sí lo hace, pero nos reservamos el as bajo la manga para más adelante. Todo llega a su debido momento.

Decíamos que como en toda película que tiene a Rudd como protagonista, nuestro galán entrará en crisis, hará un poco el ridículo frente a la cámara y cuando su vida esté a punto de colapasar una vez más tendremos el impulso de querer rescatarlo de la pantalla y decirle que todo va a estar bien, pero en este caso, la rubia Reese nos ganará de mano.


Esta semana Paul Rudd cumplió 46 años y con esa excusa sale este post y con él nace una nueva sección (babosa) en el barrio.
Espero no tener consecuencias con el vecinito!

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