01 mayo, 2015

Mi vida con Brie

Hace poco más de un año, una página amiga publicaba el siguiente aviso:


Ella es Brie e ingresó el 5/3, tras un aviso que había un gatito en un auto en El Palomar. Brie casi es atropellada y fue rescatada así, sucia y desnutrida.
Es una gatita preciosa que necesita reponerse: vamos a darle mucha comida para que pueda engordar, ya la empezamos a despulgar (estaba llena de pulgas y caca de pulga), comenzó su desparasitación y de a poquito la vamos limpiando.
Tiene apróximadamente dos meses y, como es peludita, disimula su peso real: sólo 450 gramos, es decir, está muy por debajo de su peso. 
Es muy dulce y en cuanto la acariciás un poco muestra la panza. En un tiempo estará en adopción!

Los días pasaban y Brie seguía buscando un hogar. Entonces, un nuevo aviso apareció:


Esta super bebita te está esperando. Es calladita y tímida, por lo cual buscamos un hogar tranquilo, con amor y paciencia. Tiene apróximadamente dos meses y está lista para ser tu nueva compañera de ruta. 

No se quién fue ese ángel que dio aviso que Brie estaba en ese motor del auto, tan lejos, tan sola, desprotegida y desnutrida...pero GRACIAS a ese ángel y a sus rescatistas (los chicos de El Paraíso 
Felino) hoy Brie tiene una familia, un hogar y muchísimo e infinito amor. 

Estas fotos, su breve historia y esa cara de gato con botas nos conquistó. Nos contactamos con los chicos de El Paraíso Felino , seguimos las indicaciones necesarias para su adopción y esperamos con ansiedad y alegría que la adopción se concretara. Cuando tuvimos el ok, saltamos de alegría y lo único que podíamos pensar era en su llegada a nuestro hogar. Mientras tanto compramos chiches, comida para gatito bebé, preparamos psicológicamente a Plata y contamos los días esperando a la nueva integrante de la familia. 

Finalmente el día llegó. Fue un 2 de Mayo. Hicimos limonada con menta y jengibre para convidar y brindar por Brie. 
Y fue amor a primera vista. Era una bola de pelos tamaño bonsai dentro de una transportadora enorme. Vino con golosinas bajo el brazo y muchas ganas de hacerse amiga. 
   
Hoy Brie duerme a mi lado, o mejor aún, le encanta reposar encima mío, sin manos, haciendo contacto visual. Se deja fotografiar porque se sabe bella y encantadora. Soporta mis besos y mimos. Su voz es aguda. Su pelo ya no está amarillento a causa de la grasa de auto que le sirvió para esconderse del peligro de la calle. Hoy duerme en el sillón, en la cama y en donde quiera, todo el tiempo que quiere. Está tranquila y feliz. Juega con su hermana Plata y cuando corre su cola plumosa se infla como la de una ardilla. Parece sonreír y sabemos que es así. Brie es feliz y nosotros somos más felices por compartir nuestra vida con ella. 

Brie
Un año después

Si aman a los gatos pero están dudando en adoptar, no duden en hacerlo. Si saben que van a poder darle una buena vida, responsable y amorosa, ellos se la van a retribuir el doble.
Hay muchos gatitos (y perritos) esperando un hogar.

Finalmente, El Paraíso Felino publicó:

Brie estuvo con nosotros casi dos meses. Llego hecha una bolita sucia de pelos, rescatada de un motor de auto. Mucha paciencia, mucho mimo y mucho amor le dio Juan para ponerla bien. 

Brie era tímida y bonsai, lo cual hacía que no sea el gatito más fácil de adoptar. 
Gaby, persona hermosa si las hay, nos escribió hace un par de días con intención de adoptarla. Seguimos todos los pasos de nuestro proceso de adopción... y en resultado fue positivo!
El viernes Brie se fue a vivir con su nueva familia y una hermana felina que de a poco va aflojando.
Gaby y su marido tienen tooooda la paciencia y el amor y las cosas van viento en popa.
Brie adoptada y como siempre le deseamos a ella y su nueva familia una vida enorme, larga y feliz juntos!

Y colorín colorado, este cuento se ha terminado.

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